El dispositivo LINX es un anillo de cuentas magnéticas de titanio que se coloca alrededor del esófago para reforzar el esfínter esofágico inferior. Estas imágenes, sacadas del sitio web de su fabricante (Torax Medical) muestran cómo funciona.
Sin embargo, aunque parece ser la mejor alternativa existente frente a la funduplicatura de Nissen, existen algunos obstáculos. La promoción de este producto se basa en gran medida en los posibles efectos adversos de la funduplicatura de Nissen, y ha recibido publicidad gratuita en los medios de comunicación de Estados Unidos cada vez que una nueva clínica ofrecía este dispositivo. No obstante, aunque se han apresurado a señalar las posibles desventajas de la funduplicatura de Nissen, los fabricantes no se han dado tanta prisa a la hora de advertir de los posibles efectos adversos de este producto.
Como consecuencia, una revista especializada en información médica publicó un artículo titulado “El infierno del ardor en el programa NBC Today: omiten información que los consumidores deberían saber sobre un producto de 14.000 dólares” en respuesta a una de estas campañas publicitarias. [r-viii]
Todavía no existen resultados a largo plazo.
1. El sistema LINX® ayuda al esfínter esofágico inferior a evitar la apertura ante la presión gástrica.
2. Se expande para permitir el paso al estómago.
3. La atracción magnética cierra el esfínter esofágico inferior inmediatamente después de tragar.
El sitio web de Torax Medical destacaba un informe publicado en Journal of American College of Surgeons y titulado “Cien pacientes consecutivos tratados con aumento magnético del esfínter para el tratamiento de la enfermedad por reflujo gastroesofágico: 6 años de experiencia clínica de un único centro”. [r-ix] El artículo
examinaba los resultados en pacientes que habían llevado el implante durante una media de 3 años.
El texto presentaba las siguientes conclusiones: “El refuerzo magnético del esfínter para el tratamiento de la ERGE en la práctica clínica ofrece una reducción segura a largo plazo de la exposición esofágica al ácido, una mejora sustancial de los síntomas y la eliminación del uso diario de IBPs”. Además: “Se consiguió retirar la dependencia diaria de los IBPs en un 85% de los pacientes”.
El informe también incluía las razones ofrecidas por los pacientes para elegir este dispositivo en lugar de una funduplicatura de Nissen, y señalaba que estos afirmaban que la alternativa “solo era eficaz a corto plazo, era demasiado invasiva, causaba disfagia e incapacidad para eructar/vomitar y no era reversible”.
La aprobación en Estados Unidos por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos, junto con las noticias favorables publicadas, han representado un aumento de la demanda de este dispositivo, pero los pacientes se han topado con una cierta reticencia por parte de las compañías de seguros a la hora de pagar
por él.
Muchas aseguradoras comerciales todavía consideran que el LINX es demasiado nuevo como para incluirlo en su cobertura. Portavoces de las aseguradoras Aetna y Blue Cross and Blue Shield de Minnesota han declarado que consideran que el dispositivo “se encuentra en fase de investigación” y necesita más estudios. [r-x]
Un estudio de la Universidad del Sur de California [r-xi] reveló que el 63% de los receptores del dispositivo LINX experimentaron dificultades para tragar tras el implante. El problema es que el bolo alimenticio que desciende por el esófago debe ser lo suficientemente denso y empujarse con la fuerza suficiente por los movimientos peristálticos del paciente como para separar los imanes.
Las directrices del NICE [r-xii] permiten el uso de LINX “con condiciones especiales relativas a la gestión clínica, al consentimiento y a la inspección o la investigación”, puesto que “el número de evidencias acerca de la seguridad y eficacia de la inserción laparoscópica de un anillo de cuentas magnéticas para el tratamiento de la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) es limitado”.
Un estudio publicado en Annals of Surgery en mayo de 2016 realizó un seguimiento de 164 pacientes con el implante LINX a lo largo de 48 meses, a 11 de los cuales se les había extraído el dispositivo: 2 habían sufrido una lesión erosiva de espesor total en la pared del esófago.
Otro artículo publicado en junio de 2017 [r-xiv] señalaba dos casos de migración del dispositivo a través de la pared esofágica.
Un estudio publicado en mayo de 2017 afirmaba que LINX era más eficaz que los IBPs para el tratamiento de la regurgitación en casos de ERGE. [r-xv]